Las personas con Trastorno de Ansiedad Generalizada mantienen una ansiedad constante a lo largo del día, aunque no pueden determinar con exactitud la causa real de su ansiedad. La persona se encuentra inquieta y confusa, además el objeto de preocupación no tiene por qué ser el mismo, lo amenazante puede ir mutando. Quienes sufren de este trastorno suelen mantener una preocupación excesiva. Este estado de amenaza constante aparece porque perciben el mundo como un lugar amenazante y difícil de controlar. Procesan la realidad de forma distorsionada, aplicando un filtro catastrófico al entorno que les rodea.
¿Quieres conocer los síntomas principales? ¿Hay factores biológicos o genéticos que aumenten el riesgo de parecer este trastorno? En el vídeo encontrarás todas las claves:
