Romario ha escrito en Twitter (ya sabemos que es una fuente de imprecisiones, y no es precisamente una fuente fiable de datos científicos y exactos) que el asombroso prodigio del Barcelona Leo Messi no solamente juega como juega por su asombrosa agilidad o su dinamismo, sino que es posible que su genialidad se deba a un pequeño defecto de fábrica, ya que el delantero blaugrana podría parecer una modalidad leve de autismo.
Los Savants o autistas de alto rendimiento poseen una o varias habilidades extraordinarias combinadas con un mal funcionamiento en otras áreas, especialmente las que regulan las interacciones sociales entre individuos. Los savants viven en un mundo fragmentario, siendo incapaces de entender las interacciones sociales y sus complejidades, plagadas de informaciones contradictorias, significados aparentes y dobles sentidos.
Stephen Wiltshire es capaz de dibujar una vista aérea a la perfección de cualquier ciudad con solo haberlo visto un par de horas, es capaz de dibujar todos los detalles con una exactitud impresionante: las ventanas de los pisos, las columnas de los edificios, e incluso las vallas de publicidad. Sin embargo a la edad de tres años fue diagnosticado como autista. A los cinco años, fue enviado a la escuela Queensmill de Londres, donde expresó su interés por el dibujo. Comenzó a comunicarse a través de su arte.
Alonzo Clemonts posee un CI de 40 a 60, y habla con mucha dificultad, pero es capaz de modelar a la perfección animales a partir de un trozo de barro. Alonzo puede crear una representación realista y anatómicamente precisa tridimensional de un animal después de sólo mirar a una imagen de dos dimensiones por momentos. Es más conocido por sus versiones de tamaño natural de un caballo, pero la mayoría de sus obras son más pequeñas, y realizadas en menos de una hora.
Kim Peek, el superdotado más famoso del mundo, podía memorizar una página en nueve segundos, y aprender de memoria un libro en una hora. Leía cada página con un ojo diferente.
Se especula que muchas de las mentes más brillantes que ha albergado el siglo XX compartirían muchas características de los Savants, o incluso podrían ser calificados como tales: Einstein, Goldberg, Ficher, Picasso…
Algunos de estos genios han nacido así, sin embargo otros han adquirido estos misteriosos dones a partir de accidentes o traumatismos. Por ejemplo Orlando Serrell, quien no poseía ninguna habilidad especial hasta que fue golpeado por una pelota de béisbol en el lado izquierdo de la cabeza el 15 de enero de 1979, cuando él tenía diez años. Serrell cayó al suelo, pero al final se levantó y siguió jugando. No recibió ningún tratamiento médico porque no le dijo nada a sus padres, pero durante un largo tiempo, sufrió dolores de cabeza. Con el tiempo, el dolor de cabeza terminó, pero pronto se percató de que Orlando tenía la capacidad de realizar cálculos de calendario de asombrosa complejidad.
Los investigadores intentan determinar el origen de este fenómeno, aunque aún no existe una teoría unificada al respecto. Sin embargo hay un hecho interesantísimo que se ha podido estudiar mientras se ha trabajado con estas personas, y es que a menudo se ha encontrado en muchos casos existían lesiones en el hemisferio izquierdo del cerebro, que es aquella parte del mismo que controla el área racional y de toma de decisiones. Es decir, cuando el “controlador” dejaba de controlar era posible que otras áreas del cerebro pudiesen desarrollar todo su potencial de manera asombrosa.
Este hecho concuerda con aquellos casos en los que se da un deterioro de la corteza prefrontal, y los afectados por dicho síndrome pueden llegar a desarrollar talentos parecidos a los Savants.
